Translate / Traduire / Übersetzen / Itzuli / Перевести / 번역하기 / 翻訳 / ترجمة / 译 / ...

viernes, 27 de enero de 2023

SERIE PASEOS POR LOS PARQUES Y JARDINES DE MADRID CV: MONTECARMELO, EL ÚLTIMO PAU.



Empezamos mal, Montecarmelo no es el último PAU, pero sí el tercero de los tres que conformaron el PGOU-97 por esta zona junto con Sanchinarro (pincha aquí) y Las Tablas (pincha aquí). Su forma de riñón, dicho sea con simpatía, que sobre el mapa adopta a vista de pájaro, se alza entre la M40 y la M607 apoyado sobre Mirasierra (ver aquí). Forma parte del barrio de El Goloso, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, pero como en este blog respetamos poco las divisiones administrativas y nos fijamos más en las geográficas para poder hacer recorridos más lógicos en “zancadas” únicas, vamos a incluir de Mirasierra hasta las vías del tren, pues es una zona que comparte un denominador común a la hora de nombrar sus calles con monasterios y santuarios españoles. El nombre de Montecarmelo le viene de un arroyo que pasa por un lateral y se suma al Manzanares a través del arroyo del Fresno, tal y como vimos al recorrer la Senda Fluvial del Manzanares (ver aquí) que desemboca donde se ubicó la “Playa de Madrid”, lugar al que iban las gentes de la capital a refrescar la canícula en sus tiempos. 


En el territorio de Montecarmelo se encuentra también el Santuario de Nuestra Señora de Valverde, patrona de Fuencarral, que visitamos en la Zancada correspondiente al barrio de Tres Olivos-Nuevo Toboso (ver aquí). Transcurre por este entorno el último tramo del ANILLO VERDE CICLISTA (ver aquí), antes de llegar al kilómetro 0 en Las Tablas, cuyo recorrido coincide en parte con la Vía Verde de Colmenar. También desde aquí podríamos acceder al monte de El Pardo y pasear por el trazado del Canal de Isabel II que viene de la sierra.

Vamos a realizar la ruta comenzando en la estación de Metro del barrio, línea 10, la cual ya conocemos de anteriores recorridos como el correspondiente a Tres Olivos-Nuevo Toboso, donde citamos lo curioso del cambio de tren que se produce en ese punto (ver aquí). Nos bajamos del metro y salimos a una plaza, un espacio verde donde se mezclan jóvenes árboles como el Gingko, Carpe, Cedro, Ciprés, árbol del Amor, Manzano, Acacia de tres espinas, etc. Volveremos a pasar cerca aunque de momento vamos a dirigirnos al nudo de entrada de Tres Olivos (es fácil distinguirlo por la gran bandera española).

A un lado en dirección sur, junto a la carretera M607 de nuevo, se abre una zona de parque forestal natural casi que recibe el nombre popular de "PARQUE DE LAS ALAMEDILLAS" porque en cierto momento se cruza con el Paseo de dicho nombre, el cual por resumir, llega hasta la autovía y sigue junto a las vías de Cercanías que separan Mirasierra de este enclave; no es mala denominación y así se distinguiría fácilmente de su homólogo de la zona norte. Su conformación arbórea está constituida principalmente por Pinos con algunos Tarais, Ciprés de Leyland, Morera, etc. y algunas replantaciones un tanto dejadas a su suerte. Sus vistas son espectaculares al estar un punto más alto sobre el horizonte, al fondo se ve la torre de "la Fundación", de la que hablaremos más adelante. El Parque acaba junto a la estación de Cercanías y Metro de Paco de Lucía a la que luego iremos.

Tomamos la ruta hacia el norte bordeando por zonas ajardinadas que transcurren junto a la carretera de Colmenar, paralela a la calle de los Monasterios de Suso y Yuso (por cierto, ambos Patrimonio de la Humanidad ubicados en La Rioja, en el entorno de San Millán de la Cogolla, podéis aprovechar para visitarlos virtualmente en monasteriodesanmillan.com, pero no os demoréis mucho que seguimos con el paseo). Como veréis es una zona que no es exactamente un jardín, con algún arbolado donde predomina el Almez y el Taray; responde como ya hemos comentado otras veces, a la decisión de hacer una franja de separación entre las grandes autovías interiores de Madrid y los edificios de viviendas.

 

Casi llegando a su final nos encontramos en perpendicular con una calle peatonal que se abre como un jardín y que sube atravesando entre los bloques de viviendas. Se trata de una zona ajardinada que cruzará todo el barrio de este a oeste para desembocar frente al Auditorio Plácido Domingo y las instalaciones del Colegio Santa María la Blanca (en este caso, en otros espacios, irán a otros lugares) a los que se accede por una zona peatonal ajardinada. En el recorrido de dicha calle encontramos numerosas zonas estanciales y de juegos infantiles, en unos espacios cuya amplitud varía y que tiene especies como Plátano de sombra, Morera, Árbol de Júpiter, Castaño de Indias, Magnolio, Acacia del Japón, Manzano silvestre, Carpe, Granado, Olmo inglés, Cerezo silvestre, Tilo, Pino, Fresno, Olivo, etc. distribuidos y agrupados según áreas específicas. 

 

Esta mezcolanza de viales y espacios entre los edificios que constituyen auténticos jardines, se repite por todo el espacio del PAU con una fisonomía similar, conservando áreas para gimnasia, zonas infantiles u otras estanciales, con lo cual no vamos a repetir su ubicación a cada paso, pero baste como ejemplo la descrita para saber que existen, algunas conducen a lugares muy destacables como el Colegio Alemán, el Cementerio o los citados en el párrafo anterior, pero otras simplemente cumplen su necesaria función como áreas de esparcimiento. En cada una de esas franjas verdes se pueden encontrar diferentes especies que en otra no hay o bien especies comunes a ambas, por ejemplo podríamos sumar Liquidámbar, Sauce ceniciento, Encina, Gingko, Zumaque de Virginia, Ciprés, Árbol de los Farolillos, Acacia de tres espinas, Cerezo japonés, Mimosa plateada, Nogal negro, Palmito, etc. Algunos de estos árboles se repiten en las aceras de las propias avenidas, por cierto que prácticamente todas están arboladas y cuentan con una gran anchura de acerados.

Seguimos subiendo paralelos al ANILLO VERDE CICLISTA que en sus 65 kilómetros, más o menos, rodea Madrid como un circuito de circunvalación más (lo recorrimos en una Zancada expuesta aquí). Al llegar al punto kilométrico 59,37 hay un área de descanso rodeado de algún Pino, Cedro, Nogal, etc. y falsas Acacias; a continuación la senda ciclista gira para pasar por encima de la carretera M607 y entrar al barrio  por la calle del Monasterio de Arlanza (en referencia a las ruinas del de San Pedro de Arlanza, ubicado en Hortigüela, Burgos). También aquí existe una curiosidad, unas piedras con petroglifos se alinean entre la vegetación con sus símbolos antiguos, mientras un camino de piedra se rodea a sí mismo para llevarnos hasta un campanario, reconstrucción del que marcaba estilo allá por los siglos V y VI de nuestra era. Dedicarle un rato de observación, se trata de PARQUE ÉTNICO-TRIBAL DE LA CAMPANA.

Debemos dar un gran salto mágico para reubicarnos en la plaza de la Artillería Española, lo cual hacemos subiendo por la avenida del Monasterio de Silos y donde se encuentra con la del Monasterio de El Escorial tras una parcela de terreno acotada, enfrente hay una amplia zona infantil y el inicio de espacios verdes similares a los que acabamos de recorrer. Podríamos denominar a esta zona el "Parque de Montecarmelo" pues carece de nombre y es apropiado al caso, diferentes estanciales y especies se suceden destacando los Pinos y los Álamos blancos, aunque podemos encontrar en su extraña conformación algún ejemplar de Tilo, árbol del Paraíso, etc. 

Seguimos por la senda en paralelo a la M607 donde, como vemos en las fotos, se está produciendo algo de reforestación, en concreto Encinas. Alcanzamos la pasarela dedicada a Federico Mompou (Barcelona, 1893–1987) músico y compositor español que destacó por sus obras para piano y cuya biografía podéis conocer en la Real Academia de la Historia. Esta pasarela nos permite enlazar la Vía Verde de Colmenar con la SENDA REAL que viene de Madrid, cuyo tramo más urbano vimos en otra Zancada y Guía Básica (ver aquí). Esta ruta en realidad es una senda con el nombre de calle de Federico Mompou que rodea el perímetro del barrio y va paralela a la M40, superando el Santuario de Valverde, pero nosotros no vamos a llegar hasta él pues ya lo visitamos (ver enlace al comienzo de este artículo), seguiremos cualquiera de los caminos que cruzan esta zona similar a un parque forestal joven que está esperando a que crezcan en todo su esplendor diferentes especies rodeando una urbanización de casas de dos plantas y parcela privada digna de envidiar, cuyo denominador común es la avenida del Santuario de Valverde. La Vía Verde de Colmenar mencionada se une al trazado del Anillo Verde y a un camino que conduce a dicho Santuario arbolada de Tilos de hoja pequeña. A este amplio espacio, así como a la franja de terreno que linda con las autovía, se le podría denominar siguiendo la tónica de otros barrios y distritos, como "Parque Lineal de Montecarmelo", ahí lo dejo, o "del Santuario de Valverde", que también dice mucho de su ubicación.


Llegamos así al Refugio Joven de Montecarmelo, pero nosotros seguimos nuestra ruta pasando por detrás del Colegio de Santa María la Blanca. Y ya a la vista del Cementerio, nos encontramos a la derecha con el Huerto Urbano que gestiona la AAVV del barrio y con la ruta del CAMINO DE SANTIAGO, que pasa por el antiguo camino de la Cañada que bajará la sinuosidad del terreno para atravesar bajo las vías del tren y seguir por el Valle de los Manzanos, al otro lado de la M40. Quiero recordar que en el recorrido por el barrio de Las Tablas encontramos numerosas referencias al Camino, incluso una avenida con ese nombre, según explicamos, sin embargo es por aquí por donde transcurre su trazado entre ejemplares del Chopo de Canadá. Además se une a una ruta del proyecto WAP "gente que camina" que explicamos en una Zancada aquí.


Ahí se ubica el PARQUE DEL CAMINO DE SANTIAGO, una zona ajardinada que se cubre con Pinos y Acacias entre otros. En el centro encontramos un círculo de bancos de piedra en torno a un mazacote de granito que guarda una fuente de agua, en la que se nos avisa que ya sólo nos quedan 665 kilómetros para nuestro destino, por cierto, no sé si la casualidad o la intención ha ubicado este hito aquí pero lo cierto es que ha estado a punto o lo ha evitado aposta, de dar con el "número de la bestia" que cita la Biblia. El Cruceiro típico que existe justo al lado (ver foto de encabezamiento de este artículo) nos da la pista de dónde estamos: ¡buen viaje, peregrinos!


Tras el Cementerio sigue la ruta ciclista y hay una de las varias parcelas sin construir de este barrio que, presumiblemente, debía ser ampliación del camposanto pero que parece ser que los vecinos no están muy contentos con las vistas, así que de momento esa parcela sirbe como escombrera puntual, almacén de deshechos de poda, zona canina y pista de bicicros. En cuanto al arbolado, ya os podéis figurar que predomina el Ciprés y le acompañan algunos Plátanos de Sombra, Tarais, etc. Desde la puerta (foto superior) se aprecia la avenida de Montecarmelo bien ajardinada y abierta, que combina las Acacias del Japón en los laterales del bulevar central con los Ginkgo en las aceras junto a los edificios, y que concluye en el puente de Tres Olivos, donde comenzó realmente nuestro paseo, con las Cinco Torres al fondo.

Vamos a detenernos un instante para pasear por su interior y descubrir una placa rodeada de diversas lápidas en recuerdo a las Brigadas Internacionales (vimos otros homenajes en Vicálvaro, Hortaleza, Ciudad Universitaria, etc.), no es el único monumento homenaje a los caídos en la tristemente llamada Guerra Civil española, provocada por un golpe militar contra la legalidad establecida por las urnas. A destacar por su vistosidad el monumento a los caídos soviéticos. También hay un recuerdo a los españoles fallecidos en la guerra europea.

Podemos observar desde lo alto alguna de las calles ajardinadas que se abren entre los bloques que hemos citado (por ejemplo entre las calles del Monasterio de El Paular y la del Monasterio de Montesclaros, o entre ésta y la del Monasterio de las Batuecas), pero seguimos nuestro camino por la ruta del Anillo Verde y podemos aprovechar para tomar un respiro en alguna de las zonas de descanso habilitadas, como la que vemos en la foto sobre este texto, una curiosidad de arquitectura de setas de hormigón que crecen de forma artificial en el centro de un gran círculo creado para descanso de los deportistas que por aquí transcurren.

También alcanzaremos la parte de atrás del Colegio Alemán establecido aquí y el viejo Mirador de Montecarmelo; en este caso la ruta se encuentra rodeada de Moreras blancas y Plátanos de sombra sucesivamente que han sustituido a los Tilos que vimos en el primer tramo. Y con estas vistas por encima de la M40 hacia la cercanía de los montes de El Pardo y Guadarrama al fondo, descendemos ahora hacia la glorieta del Santuario de Tíscar (en recuerdo de la Virgen de dicho nombre, cuyo santuario se encuentra en Quesada, Sierra de Cazorla, Jaén) que marca la "frontera" entre Montecarmelo y Mirasierra, la cual continúa por la avenida del Monasterio de Silos hasta su cruce con la de Montecarmelo por la que sigue hasta el puente de Tres Olivos citado. Al un lado de la glorieta del de Tíscar nos encontramos con un coqueto parque donde se funden diferentes especies predominando el Pino con la Morera y el Plátano de sombra en particular, con alguna Morera Blanca, Acacia, Abeto, etc.

Subimos por una rampa que nos eleva al Mirador de Montecarmelo, desarrollado dentro del proyecto "Madrid, isla de color" que pretendía crear una serie de espacios alrededor de la ciudad dentro de la iniciativa del Bosque Metropolitano (ver Zancada al respecto aquí), de la cual se hizo "algo" y luego se abandonó sin más. Desde esta zona elevada tenemos una visión amplia de Madrid, el monte de El Pardo y la sierra de Guadarrama. 

Realizado en este montículo donde esta el Mirador visto, sobre la cúspide se conserva hoy mediante la Fundación Alapar el recinto de lo que fue el Preventorio para hijos sanos de familias leprógenas mandado erigir por el Patronato "Niño Jesús del Remedio" en 1951 al arquitecto Miguel de los Santos Nicolás, el cual participó en las construcciones sanitarias de la época realizadas en el entorno de la Ciudad Universitaria y el Hospital San Carlos. El complejo es una serie de edificaciones conectadas entre sí en forma de H, con una entrada central a través del patio al que rodean entre otros brazos de dicha estructura, uno que es la propia iglesia que cuenta con un campanario múltiple integrado en la fachada, como se ve en una de las fotos sobre este texto. En el centro de la edificación, una gran torre estilo palomar contenía instalaciones de dormitorio para los residentes entre otras cosas y encima un gran depósito de agua para el abastecimiento propio. Realizado en ladrillo con adustez, gran luminosidad y un horizonte infinito, se conserva y ha sido reforzado con otras instalaciones aledañas.

 

Y aprovechando la cercanía, bajamos por unas oportunas escaleras y rampas hacia la estación de Paco de Lucía donde se encuentra el famoso mural dedicado a este guitarrista, una obra de arte que conocimos a fondo en la serie MURALES con el número 2, ver aquíCon esto ya concluimos, aunque podríamos caminar por el pequeño espacio verde que rodea la vía del tren y bajar a la cota más baja, donde un túnel une esta parte del barrio de Mirasierra con el resto, según vemos en la foto superior con los edificios al fondo y el tren pasando. Lo explicamos aquí.



@ 2023, by Santiago Navas Fernández


No hay comentarios:

Publicar un comentario