Partiendo de donde acabamos en la anterior Zancada, hemos de recordar que la calle que nos sirve de argumento en esta ruta, era mucho más corta cuando se creó, tras los planes urbanísticos y con el crecimiento de los barrios, se constituyó en un gran eje que contaba con un bulevar, posteriormente el diseño de la ciudad lo suprimió en beneficio del tráfico rodado y hoy día cuenta con plátanos de sombra a sus lados y una mediana entre los dos carriles donde imperan los Ginkgo Biloba, árbol resistente y cuya hoja es de una forma muy característica. Nada más comenzar y a la espalda de la calle Felipe Campos, nos encontramos unos pequeños jardines fruto de una parcela que ha quedado encerrada entre edificios de nueva planta y también con una zona ajardinada en la calle del Duque de Sevilla donde encontramos la Fuente Fundición realizada por la famosa fundición Averly de Zaragoza creada en 1855 y que es la autora de numerosas obras repartidas por toda la geografía nacional, ésta en concreto consta de un vaso sobre suelo, de dos metros de diámetro, del cual parte la estructura que vemos en la foto apoyada sobre un pie de piedra, con ornamentación toda elaborada en hierro y dos platos sucesivamente puestos de diferentes diámetros unidos por el eje central hasta culminar en una piña de donde brota el agua que cae hacia el pilón derramándose por el borde de dichos platos.