De tanta tradición es para Madrid la DEHESA DE LA VILLA como el PARQUE DEL OESTE y su entorno, pues ya antes de crearse como tal, sus tierras actuales formaban parte de los diferentes territorios que rodeaban Madrid en ambos casos. Desde el original Campo de San Antonio que pertenecía al Real Sitio de la Florida lindante con la propia citada Dehesa de Amaniel se comenzó a construir como parte inseparable del Ensanche de Madrid, entre los arroyos de San Bernardino y la antigua cuesta de Areneros (hoy calle del Marques de Urquijo), y desde la calle de San Bernardino (actual Princesa) hasta el paseo de San Antonio (actual de la Florida); sus terrenos fueron expropiados en 1873 por la I República y entregados al municipio para la realización de un parque público. En 1985 obtuvo la catalogación de la Comunidad de Madrid como Parque Histórico. Tras las sucesivas ampliaciones, comprende otros espacios diferenciados como son el PARQUE DE LA TINAJA, la ROSALEDA, los JARDINES DEL TEMPLO DE DEBOD, la FUENTE DE LA SALUD, etc. Es custodio de la Historia de la capital y esconde anécdotas, monumentos y singularidades que lo convierten, casi, en un museo que vamos a recorrer por etapas, comenzando por ésta en la que además de asentar su origen, veremos y recorreremos la singular calle de Francisco y Jacinto Alcántara, cargada de elementos propios y que concluye en los recuerdos del 1808 y su relación con Goya.